Traducción

Cristina Medrano de Cuatro Hojas Editorial (entrevista)

Hoy entrevistamos a Cristina Medrano Moreno, editora al frente de Cuatro Hojas Editorial. Cristina, con una larga experiencia en el sector editorial y del libro decidió fundar su propia empresa en el año 2015. Desde entonces no ha parado de acompañar a muchos autores a lo largo de la creación del libro, desde la gestación hasta la publicación. Y es que trabajo hay mucho, un libro no se hace solo, un libro necesita a un autor y a muchos otros profesionales.

Como amante de las letras, de las lenguas, de los libros y del mundo editorial en general que soy, no quise dejar pasar la oportunidad de entrevistar a Cristina de Cuatro Hojas.

Cuatro Hojas Editorial

¿Cuál es exactamente el papel de un editor ?

Hay muchos tipos de editores: editor técnico, editor literario, editor general… Yo te puedo decir cuál es mi papel en Cuatro Hojas. Mi papel es ocuparme de todo lo que lo que necesite un libro desde el momento en que nos llega un documento en Word hasta que se agota la tirada. Estas tareas incluyen corrección, maquetación, traducción, ilustración, gestión de licencias, impresión, seguimiento de la venta… Algunas de estas tareas las hago de manera directa (soy correctora, y los libros simples también los maqueto yo) y en otras simplemente coordino el proceso.

¿Cuál crees que es el papel del libro en la sociedad actual? ¿Seguimos leyendo?

Leemos menos, pero es normal. Hace un siglo solo había libros. Ahora hay libros, cine, tele, internet, móviles… Y aun así, seguimos leyendo.
En cuanto al papel de los libros en la sociedad, sí es verdad que ha cambiado mucho. Se ha democratizado el acceso a la publicación, lo cual tiene sus cosas buenas y sus cosas malas.

Antes tenías que esperar a que alguien te descubriera, y eso era muy difícil. Ahora cualquiera puede publicar, pero eso hace que la calidad media haya bajado mucho. Nosotros al menos, desde Cuatro Hojas, tratamos de mantener el listón alto.

En Cuatro Hojas Editorial, ¿qué servicios propones?

Además de todos los que he mencionado antes, en pack (de cara a una publicación) o por separado, también ofrecemos cursos de escritura, cursos infantiles, de maquetación, de marketing para escritores…

¿A qué tipo de autores te diriges?

En principio no somos una editorial especializada en un solo género, el sesgo no va por ahí. Lo que nos interesan son autores apasionados con su obra, que entiendan la importancia del proceso, de las buenas calidades, que les interese hacer llegar su obra a los potenciales lectores…

¿Y a qué tipo de lectores?

Tenemos libros casi para todos los gustos, y libros muy buenos. Algunos lectores son reticentes a comprar autopublicaciones porque, como decía antes, a veces la calidad deja mucho que desear: libro con faltas de ortografía, ortotipografía inexistente, “maquetaciones” en Word, malos acabados… Aquí eso no va a pasar.

Yo animaría a los lectores a asomarse a historias que no se van a encontrar en los grandes canales comerciales pero que merecen mucho la pena.
Cuatro Hojas Editorial

Hoy en día, algunos oficios muy conocidos del mundo editorial se rebelan contra su precariedad, tanto por temas económicos como por temas de condiciones del trabajo. Es el caso, sobre todo de correctores y traductores. ¿Qué opinas de todo ello?

Todo esto tiene que ver con el sistema de edición tradicional, que ya está dando sus últimos coletazos. Un libro es un objeto con un precio medio de entre 10 o 20 euros, según cómo sea. De ahí cobra el corrector, el maquetador, la imprenta, el editor, la librería, la distribuidora y el autor. Y todavía me estoy dejando gente seguro. Normal que haya precariedad. Cuando existían pocos títulos al año y sus ventas se contaban por decenas de miles de ejemplares, era otra cosa.

Ahora los autores se quejan muchísimo de la ridiculez que se gana al publicar un libro por el sistema tradicional (cuando se gana algo). Nuestro sistema está pensado para favorecerles a ellos, con beneficios para el autor de hasta más de un 60% sobre el PVP, eliminando intermediarios.

Hablemos ahora un rato de la lengua. Se suele decir que la gente ya no sabe escribir. O, al menos, no sabe escribir bien. Que las redes sociales han hecho mucho daño a la escritura. ¿Es eso cierto? ¿Lo ves tú en los manuscritos que recibes?

Yo creo que no. El índice de analfabetismo ha caído en picado. Todo el mundo sabe leer y escribir y la mayoría saben hilar un discurso más o menos coherente (otra cosa es que sean vagos, sobre todo en las redes…). Lo que pasa es que la lengua se ha convertido también en un índice de clasismo. Nos ponemos muy estupendos y tachamos a otros de incultos cuando cometen alguna falta de ortografía.

Libro en papel y libro en formato electrónico deben estar reñidos, ¿sí o no?

No tiene por qué. Para empezar en España yo creo que no han acabado de calar los libros electrónicos. Aquí todavía le cuesta a la gente eso de pagar por algo virtual que no se puede tocar… Pero más allá de eso, hay libros que nunca podrán (creo) sustituirse por ebooks: los ilustrados, los infantiles, los pop-up, las novelas gráficas… Incluso los libros que simplemente te gustan mucho y quieres tenerlos físicamente.

Dinos, Cristina, cuando empezaste tu aventura en Cuatro Hojas Editorial, ¿ya sabías dónde metías los pies? ¿Qué tal se gestiona una empresa del mundo cultural?

Cuatro Hojas nació en 2015, aunque esta historia empieza mucho antes… Yo venía de trabajar en otras editoriales de autoedición y tenía bastante claro cómo funciona este mundo. Además, yo también fui autora y sabía de primera mano lo que quiere y necesita un autor cuando va a publicar un libro, tanto si es la primera vez como si no: necesita saber que está en buenas manos, que vamos a leer su libro (esto parece una obviedad pero en las plataformas de autoedición no hay nadie que lea tu libro), que vamos a entenderlo, a corregirlo respetándolo, a sacarle el máximo partido en la maquetación, a diseñar una portada adecuada al contenido y que llame la atención… y a ofrecerle un precio que le permita rentabilizarlo.

A mí me encanta trabajar en el ámbito de la cultura y poder contribuir a dar voz a mis autores. La cultura se construye desde abajo, y en eso estamos…

Gracias, Cristina

Bilingüismo

Yo y el mundo

Libro Yo y el mundo, librería Pájaros en la cabeza

Yo y el mundo, el mundo y yo.

Los que ya me conocéis bien y, para los más nuevos, si leísteis mi último artículo, sabréis que doy una gran importancia a la diversidad y a la tolerancia. Si les doy una gran importancia es porque para mí son dos aspectos íntimamente ligados al bilingüismo y a la diversidad lingüística.

Respetar las lenguas es una muestra de apertura.

Además, una lengua nos indica siempre muchos aspectos de un pueblo, de un país, de su gente y de sus personas. Muchas veces, si alguien reacciona o actúa de tal forma es porque habla tal lengua.

Lo que ocurre es que la vida va tan deprisa que no tenemos tiempo de pararnos para pensar en esos pequeños detalles lingüísticos que nos conforman y componen.

Yo y el mundo es el título de un libro

Yo y el mundo es el título de un libro que compré en una librería española online que desconocía por completo hasta hace muy poco. Fue gracias a las maravillas de Internet que descubrí Pájaros en la cabeza.

El libro lo compré para mi hija y también para mí. Es un libro familiar. Un libro que muestra la diversidad social, que habla con una preciosas infografías de la vida en el mundo, de las diferencias entre los países, de distintas costumbres.

Thelma y yo leemos este libro por las noches y es encantador. Además, ahora que ya empieza a leer, le gusta poder descifrar algunas palabras. Siempre ha sido una niña bastante curiosa y este libro se presta muy bien a las preguntas.

No, Yo y el mundo no es ninguna novela, no es ningún cuento infantil, es la radiografía del mundo, con porcentajes y tasas, con número y cifras pero contado desde la perspectiva de Lucía, una niña española de 8 años de clase media. Un libro con muchos colores, un libro grande con un tacto suave y agradable, un libro que permite reflexionar sobre la vida.

Libro Yo y el mundo, librería Pájaros en la cabeza
En definitiva, estamos ante un libro que muestra a la perfección esta diversidad cultural sumamente ligada a la diversidad lingüística y a la que tanta importancia damos en casa.
FICHA DEL LIBRO
TÍTULO: Yo y el mundo. Una historia infográfica
AUTORES: Mireia Trius (textos) y Joana Casals (ilustraciones)
CORRECCIÓN Y TRADUCCIÓN: Diana Novell
Publicado por Zahorí Books
Primera edición: marzo de 2019
Libro Yo y el mundo, librería Pájaros en la cabeza Libro Yo y el mundo, librería Pájaros en la cabeza

Pájaros en la cabeza

Pájaros en la cabeza es una librería online y blog de literatura infantil y juvenil regentada por Esther y su familia. Se trata de un espacio de intercambio, donde las prisas no cuentan, donde lo más importante es el placer de la lectura, donde los libros son mucho más que un objeto físico.

Paseándome por el catálogo de Pájaros en la cabeza me quedé maravillada con los títulos que proponen. Libros de una belleza estética importante y, sin conocer realmente a Esther, sentí enseguida que detrás de cada nueva aportación al catálogo hay mucha reflexión.

Creo no mentir si digo que lo que les interesa no es vender libros por vender, no les interesan los libros que todo el mundo ya conoce, no, lo que desean es acercar al público infantil y también juvenil, nuevas lecturas con profundos mensajes.
A mí me cautivó particularmente la alianza de lo estético con narrativas interesantes.

Nada mejor que un precioso libro, con colores, bonitas tipografías y una niña narradora de 8 años para dar a conocer las diferencias del mundo a nuestros peques bilingües !

 

Bilingüismo

No todos los bilingüismos son iguales

 

 

desigualdades bilingüismos familiares

¿Por qué no todos los idiomas son percibidos de la misma forma?
¿Por qué hablar inglés es cool y hablar algún dialecto árabe no tanto?

Desde hace algunos años vengo observando que el bilingüismo familiar no es percibido igual según las lenguas que se manejen.

Si las lenguas de por sí ya tienen casi siempre un estatus social, cuando se trata de bilingüismo las cosas no cambian.

La desigualdad social de las lenguas

Así pues, vemos por todas partes florecer miles de proyectos que tienen el bilingüismo como reclamo, sobre todo en la esfera educativa pero también en los negocios y en las relaciones laborales. Si nos fijamos bien, estos proyectos tienen por bandera lenguas de élite como pueden ser el inglés, el español, el francés y ahora también el chino mandarín.

Tratándose de proyectos casi siempre privados y de la libertad de elección de cada ciudadano a la hora de trazar el camino de su vida, pocas cosas se pueden añadir si no es decir que es el reflejo de una realidad social que sigue dividida en estratos.

Pero lo que más me disgusta es el trato que se da a ciertos bilingüismos familiares.

La importancia del entorno: respeto y tolerancia lingüística

Nuestro trilingüismo familiar francés-español-catalán está bien visto. Siempre me dicen que es una riqueza para la niña, que qué bien que haya nacido con estas tres lenguas.

En cambio, otras familias no corren la misma suerte. Otras familias que tienen el turco y el francés, por ejemplo, tienen que oír y aguantar comentarios despectivos. ¿Por qué? me pregunto yo… ¿Por qué?

Ocurre muchas veces en espacios públicos y también en centros escolares.

Ocurre que digan a padres y madres de lenguas vistas como inferiores que dejen de hablar dicho idioma a sus hijos para no perjudicar sus aprendizajes.
Ocurre que miren con cara de desprecio a estos padres y madres que hablan una lengua vista como inferior mientras están en el parque jugando con sus hijos.

Esto ocurre.

Y esas cosas no se pueden decir así como así; a no ser que se tengan argumentos sólidos de expertos (logopedas, psicólogos, médicos…).

Esas cosas no se pueden decir a la ligera porque la importancia de la transmisión cultural es muy alta en la construcción y desarrollo de un niño. Y la cultura pasa por la lengua.

Un niño no puede verse privado de su lengua materna. Privar a un niño y, por ende, a unos padres de su lengua materna es como pintarse el corazón de otro color. El corazón seguirá siendo corazón y hará sus funciones pero con un velo que no deja ver las cosas de la misma forma.

Queda todavía mucha pedagogía por hacer en cuanto a la diversidad lingüística y a la importancia de la lengua materna.