Bilingüismo

Familias trilingües: el Podcast

El viernes por la tarde tuve la oportunidad de participar en una charla muy interesante sobre familias trilingües organizada por Laura Mascaró.

Laura es la creadora de una serie de podcasts que va publicando semana tras semana en su canal de Youtube. Ella es jurista, escritora, formadora y madre unschooler. Es también la autora de TarkusKids.com y DesescolarizaciónInterior.com. Fundadora de la Plataforma por la Libertad Educativa, Consejera para España de la Libertarian International Organization y miembro del Instituto Juan de Mariana. Una madre y profesional muy activa en temas relacionados con la infancia.

Para este episodio, Laura decidió abordar el tema del trilingüismo:

¿Cómo pueden los niños pequeños aprender varios idiomas a la vez y qué podemos hacer para ayudarles?

En la mesa, también participó Arantxa Colom, abogada afincada en Barcelona, madre de dos hijos de padre italiano que, además, están aprendiendo inglés.

Para escuchar integralmente el podcast:

En casi una hora de charla nos dio tiempo a tocar muchos puntos:

¿Cómo manejan los niños los diferentes idiomas?
¿Qué método usamos para «distinguir» las lenguas, la técnica de una lengua una persona (One Person One Language) o no?
⇒ ¿Cuándo hay más gente presente, seguimos hablando nuestra lengua materna a nuestros hijos?
⇒ ¿Los pequeños mezclan los idiomas? Si así es, ¿corregimos o no?
⇒ Diferencias entre adquisición y aprendizaje…
⇒ ¿Quién les enseña a leer y a escribir en esas lenguas maternas que a veces son minoritarias?
⇒ 

¡Y como siempre, no dudéis en compartir vuestras experiencias!

Cuando hablo de bi(tri)lingüismo, siempre me gusta acabar recordando que una lengua es mucho más que una simple herramienta de comunicación, una lengua es un todo: es cultura, es sentimientos, es viajes, es vida... Por que nadie transmitirá mejor que un/a padre/madre la lengua materna a sus hijos y estemos ahí donde estemos, esa transmisión es una riqueza incalculable, un tesoro infinito, el mejor de los legados!

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Para más información sobre los trabajos de Laura Mascaró podéis consultar su Web

Aprendizaje

Progresos de una pequeña bilingüe (y algunas herramientas)

 

niños bilingües

 

Renacuaja, sonriente y jovial, un poco cabezota, curiosa, le encanta hacer piruetas y dar vueltas como una mariposilla revoltosa y sobre todo, repite, repite, lo repite todo como un lorito! A dos días de sus 19 meses, nuestra Princesita resulta ser una gran comunicadora. Nada de excepcional, Princesita es como las otras princesitas y nosotros somos padres como los otros padres.

Pero silenciosamente y de reojo, la observamos evolucionar lingüísticamente. Mi mirada y la de ChériGuiri se cruzan a veces queriendo mostrar la sorpresa e interrogándonos sobre las razones por las cuales en un momento dado elige hablar en una lengua y no en la otra. Sé muy bien que los niños son niños y que no tengo delante de mi una máquina pero, a menudo, me encantaría poder descodificarla como si de un artefacto se tratara. Me gustaría tanto inmiscuirme en el cerebro de esta niñita y comprender el funcionamiento del mecanismo lingüístico. Desde que vivimos esta aventura del bi-trilingüismo, tengo la impresión de que la Princesita se ha convertido en una caja de sopresas:

– A veces, durante semanas designa algo en francés y tres semanas después cambia y lo dice en catalán…
– ¿Por qué tiene tan inculcado su «au revoir» hasta tal punto de no decir nunca «adéu»?
– ¿Por qué siempre es «aigua» y nunca «de l’eau»?
– ¿Por qué decide poner un acento y no el otro en palabras casi-homófonas como «ma»/»main» – «maman»/»mamà» – «caca» – «bebé» – … ?
– ¿Por qué ahora el «pié», seguramente del francés «pied» parece que sea del español «pie» y no del catalán «peu»?
– ¿y por qué, por qué, por qué?

Me encanta tomar nota «mentalmente» de sus costumbres y progresos lingüísticos. Y aunque sepa muy bien que no tengo ningún poder de decisión sobre ello, sigo teniendo algo de miedo de que mis lenguas maternas se vean relegadas a un segundo plano. Voy a intentar que no sea así.

Métodos y herramientas

De momento utilizo los mismos métodos de los que hablé hace algunos meses (dando prioridad al método OPOL). Por ahora, no le gusta nada quedarse delante de la tele pero a veces intento ponerle algún DVD de la serie de la gallinita Koki que, dicho sea de paso, es una gallinita que habla un idioma universal «koki-ko ko-ko-ki-koko» (o sea que no sé por qué el DVD me da a elegir entre catalán o castellano, es un poco surrealista). ¡Se trata de una gallinita muy conectada y moderna, os lo aseguro, incluso tiene un Google + y una página Facebook! También me gusta ponerle la muy lograda serie de los Baby Einstein…pero vamos, de momento esta técnica no tiene mucho éxito, a los cinco minutos ya está harta de tele y se pone a bailar!

En cualquier caso, voy a continuar, de vez en cuando, a informaros de las aventuras de la Princesita bi-trilingüe y sus amigos profes de lenguas, es decir, sus peluches, sus doudous, los libros (una super tienda online en Francia es Linguatoys), las canciones… !

Lifestyle

A mi hija, y a todas las hijas de todas las madres

Princesita mía:

Todos los días es un nuevo despertar, todos los días me deslumbras con tu sonrisa rebosando de energía y tu mirada tan viva y tan llena de amor. Pienso en ti, todo el tiempo, de día y de noche. Te abrazo hasta en mis sueños y te acaricio durante horas. Yo te muestro cosas y tu me enseñas a ser mamá. Pasamos muchas horas juntas, cada instante contigo se convierte en un nuevo rayo de sol.

Me apetece decirte tantas cosas, explicarte tanto sobre la vida. Pero la vida se tiene que vivir, ya verás. Yo te alertaré, te abriré y te mostraré los caminos, nunca voy a cansarme de acompañarte, de tenderte la mano. Pero un día, abrirás tus alas y volarás:

Y como nunca se sabe lo que la vida nos depara…

Por eso quiero y deseo que vivas la vida, siempre, pase lo que pase. No quiero que dejes nunca la vida tendida de un hilo, sin tener nada que hacer. En ocasiones la vida te va a herir y te sentirás mal, muy mal y será duro, para mí también. Pero será en momentos así cuando voy a recordarte que tienes que levantarte, una y otra vez, tendrás que buscar la valentía y mirar hacia adelante. Siempre hacia adelante y con una gran sonrisa.

No te enfades con nadie, ni con nada, no merece la pena… te darás cuenta que después de haberte enfadado necesitarás encontrar como desenfadarte. Ya verás como los malos tragos pasan. Créeme.

Me gustaría que cada día pensaras en todos los momentos vividos, pasados y presentes, ya sean buenos o malos, de todo aprenderás.

Y si algún día el amor llega y te duele, míralo de frente y aprende a sentirlo de otra forma. Nunca pienses que el mundo se va acabar. Ya verás como tu corazón será capaz de transformar los pensamientos y los sentimientos para acostumbrarse poco a poco a ese dolor que, además, acabará convirtiéndose en simple recuerdo.

Porque yo quisiera, hija mía, que te ocurra lo que te ocurra, ¡siempre sigas adelante y camines con la cabeza bien alta!

Y sobre todo: ¡Siéntete bien! ¡Quiérete!

Te amo princesita,

Carta a mi hija

 

Margarida