Viajes

Paseo bretón, en el Morbihan

A veces, por unas horas, nos adentramos en la Bretaña, dejamos a nuestra princesita con papi y mamie y aprovechamos para pasearnos, como dos enamorados. Y es que, además, con esos paisajes tan bonitos, poca cosa más nos hace falta para sentirnos felices y reconocer que tenemos suerte de estar tan cerca de lugares tan bonitos!

Visitamos Larmor-Baden, una mañana de un cielo un poco cubierto, pero da igual, le daba un toque más bretón a nuestro paseo! Pudimos contemplar la isla de Berder. Aunque bueno, a mi, que vengo de una verdadera isla, me hace sonreír eso de «isla», porque para mi, un trozo de tierra como ese tendría más bien que llamarse «islote» !! Ya veis, en casa solemos chincharnos!

Paseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesa

Finalmente, el sol decidió unirse a la fiesta (¡qué bien!) por lo que alargamos nuestro paseo un poquito más. Nos fuimos hasta el puerto de Saint-Goustan, en Auray. Y allí me sentí presa de una ola de recuerdos, de mi vida en Lorient, de mi amiga andaluza que vivía en Auray y de nuestras largas tardes de invierno cuando, al no tener coche, nuestra mejor actividad era la de tomarnos unos chocolates calientes en los bares. Le mandé una foto por Whatsapp. Y adivinó dónde estaba. Como veis, hay cosas que nunca se olvidan!

Hicimos, después, una parada en Vannes. Nos encanta esta ciudad. ¡Es tan bella! Una pequeña-gran ciudad bretona con mucho encanto. Era el fin de semana del Salón del Libro y de lo alto de los restos de las murallas, unas vistas impresionantes sobre los jardines con las carpas que acogían a autores y libreros, jardines salpicados de unas mesas muy coloridas, era bonito! Bajamos y visitamos todo eso.

Y ya, poco a poco, se anunció el atardecer…

Paseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesaPaseo por el Morbihan, en la Bretaña francesa
Bilingüismo

Mi hija será trilingüe

¿Y no crees que va a liarse?

Sinceramente, ya me han hecho esta pregunta más de una vez. Y la verdad es que me choca un poco. No soy del tipo de personas que responden a esas preguntas con explicaciones científicas sino que, simplemente, contesto con un «no, no, que va…» Aunque en el fondo pienso «¿cómo es posible que me pregunten eso?». Si bien la gente es bastante abierta, Francia sigue conservando, de alguna forma, ese «pensamiento de lengua-única» heredado de la historia misma del país. Cierto, todo el mundo está de acuerdo con el hecho de que hay que estudiar inglés, una lengua muy importante, pero de aquí a entender perfectamente que un niño pueda ser trilingüe de nacimiento hay una pequeña/gran diferencia.

Seamos sinceros: decir que mi niña será trilingüe es algo pretencioso. Cierto. Sí. (Pero ya queda bien para el título, ¿no? :-)!). Bueno, me explico: la niña será, evidentemente, bilingüe (francés-catalán) y con algo más de esfuerzos será trilingüe (español). Ya os he explicado que yo hablo indistintamente el español y el catalán pero elegí hablar a la cría en catalán porque es la lengua que se habla en mi familia, la lengua de corazón (como se dice). El español, puesto que es uno de los idiomas más importantes del mundo, también lo va a aprender. No conseguirá un trilingüismo equilibrado pero sabrá hablar las tres lenguas.

Mi niña será trilingüe

¿Y cómo lo vamos a hacer?

Yo le hablo en catalán pero, a menudo, jugamos a las marionetas o cantamos en español. También, cuando vamos a España, el contexto geo-socio-lingüístico hace que español y catalán cohabiten sin demasiado problema: una página del periódico de turno está en español y el artículo de al lado está en catalán, en familia hay aquél que habla español aunque entienda el catalán, el monitor del centro de actividades que viene de la península habla español a los niños, que le contestan en catalán y muchos otros ejemplos de una región donde dos idiomas son co-oficiales. Y además, ¡un paquete de más de 100 DVD de dibujos animados en español (gracias amigos!).

Padres de niños bi-tri-lingües, no seamos tampoco ingenuos: cuando nuestros niños empiecen a ir a la escuela, la lengua del país se convertirá rápidamente en dominante. No pasa nada, nuestros niños, que no son tontos, encontrarán de nuevo un equilibrio entre las dos-tres lenguas. Todo se hace de manera natural.

Mi niña será trilingüe

Y para seguir en lo positivo, ¿cuáles son las ventajas para los niños trilingües?

– abiertos de mente;
– facilidad para crear vínculos sociales;
– más interés por otras culturas;
– el cerebro asimilará fácilmente una cuarta o quinta lengua puesto que le será más fácil organizar las estructuras y conexiones;
– sensibilidad comunicativa.

 

Lifestyle

A mi hija, y a todas las hijas de todas las madres

Princesita mía:

Todos los días es un nuevo despertar, todos los días me deslumbras con tu sonrisa rebosando de energía y tu mirada tan viva y tan llena de amor. Pienso en ti, todo el tiempo, de día y de noche. Te abrazo hasta en mis sueños y te acaricio durante horas. Yo te muestro cosas y tu me enseñas a ser mamá. Pasamos muchas horas juntas, cada instante contigo se convierte en un nuevo rayo de sol.

Me apetece decirte tantas cosas, explicarte tanto sobre la vida. Pero la vida se tiene que vivir, ya verás. Yo te alertaré, te abriré y te mostraré los caminos, nunca voy a cansarme de acompañarte, de tenderte la mano. Pero un día, abrirás tus alas y volarás:

Y como nunca se sabe lo que la vida nos depara…

Por eso quiero y deseo que vivas la vida, siempre, pase lo que pase. No quiero que dejes nunca la vida tendida de un hilo, sin tener nada que hacer. En ocasiones la vida te va a herir y te sentirás mal, muy mal y será duro, para mí también. Pero será en momentos así cuando voy a recordarte que tienes que levantarte, una y otra vez, tendrás que buscar la valentía y mirar hacia adelante. Siempre hacia adelante y con una gran sonrisa.

No te enfades con nadie, ni con nada, no merece la pena… te darás cuenta que después de haberte enfadado necesitarás encontrar como desenfadarte. Ya verás como los malos tragos pasan. Créeme.

Me gustaría que cada día pensaras en todos los momentos vividos, pasados y presentes, ya sean buenos o malos, de todo aprenderás.

Y si algún día el amor llega y te duele, míralo de frente y aprende a sentirlo de otra forma. Nunca pienses que el mundo se va acabar. Ya verás como tu corazón será capaz de transformar los pensamientos y los sentimientos para acostumbrarse poco a poco a ese dolor que, además, acabará convirtiéndose en simple recuerdo.

Porque yo quisiera, hija mía, que te ocurra lo que te ocurra, ¡siempre sigas adelante y camines con la cabeza bien alta!

Y sobre todo: ¡Siéntete bien! ¡Quiérete!

Te amo princesita,

Carta a mi hija

 

Margarida